La competitividad y estrategia en los negocios es algo que no debe faltar a la hora de implementar un plan de acción para emprender un nuevo negocio o darle más valor al que ya se tiene.
El fin de cualquier negocio o empresa es ser competitivo a nivel local, regional o mundial y aunque no existe una fórmula mágica para lograrlo, tener estrategias definidas será clave para poder alcanzarla.
Se escucha mucho sobre las estrategias, pero lo primero que hay que hacer para implementarlas es entenderlas, este es su significado: “estrategia es un plan que especifica una serie de pasos
La competitividad se refiere a la capacidad que tiene una persona, empresa o país para obtener rentabilidad en el mercado frente a sus otros competidores”
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¿Qué es y cómo funciona?
Es decir que, si el objetivo a corto plazo de una empresa es tener liquidez financiera, para lograrlo debe establecer una estrategia bien definida, que sea entendible para todos los empleados y ellos puedan trabajar para alcanzar el objetivo.
Cuál es la relación entre la competitividad y la estrategia
La competitividad y la estrategia deben ir de la mano en los negocios, ya que en el mundo actual donde existen todo tipo de empresas que buscan sobresalir, las estrategias ayudan a que las acciones estén bien encaminadas para que la empresa sea sostenible a largo plazo.
Para que las estrategias estén bien establecidas y permitan alcanzar la competitividad antes es necesario conocer muy bien el mercado al que se dirigirá el negocio, cuáles son las fortalezas y oportunidades del sector, además de conocer las amenazas para estar preparados para enfrentarlas y las debilidades para volverlas una oportunidad.
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La competitividad está ligada con el valor único que da la empresa o negocio a sus clientes, es eso que los hace elegirlos por delante de la competencia y que al mismo tiempo le ayuda a generar beneficios para el negocio y en la actualidad la innovación y la tecnología también son piedra angular para ellos.
Cómo establecer una estrategia competitiva
Para definir una estrategia competitiva, se debe volver a lo básico y Michael Porter definió tres tipos de estrategia competitivas para las empresas, pero es importante que antes de elegir en cual se enfocará debe conocer el mercado al cual se dirigirá.
Estrategia de diferenciación: Esta se refiere a ofrecer productos o servicios que sean diferentes a los que ofrece la competencia. Brindarles una experiencia única que los haga fidelizarse con el negocio.
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Estrategia de líder en costes: Como su nombre lo indica este tiene que ver específicamente con el costo que se le da a los productos o servicios, que estos sean más bajos que los principales competidores, pero sin descuidar la calidad de estos.
Estrategia de enfoque: Está es más específica e incluye las dos anteriores, pero enfocando todo el esfuerzo de estas a un sector en específico del mercado.
Para poder definir la que mejor se adapte al negocio es importante contar con la asesoría adecuada para hacer que la estrategia y la competitividad generen un valor a largo plazo en el mercado.